jueves, 29 de octubre de 2015



LA ROBOTICA 


La robótica es la ciencia que estudia el diseño y la implementación de robots, conjugando múltiples disciplinas, como la mecánica, la electrónica, la informática, la inteligencia artificial y la ingeniería de control, entre otras.
Para definirlo en términos generales, un robot es una máquina automática o autónoma que posee cierto grado de inteligencia, capaz de percibir su entorno y de imitar determinados comportamientos del ser humano.
 Los robots se utilizan para desempeñar labores riesgosas o que requieren de una fuerza, velocidad o precisión que está fuera de nuestro alcance. También existen robots cuya finalidad es social o lúdica.
Desde siempre, las personas han inventado mecanismos y desarrollado tecnologías que les permitieran traspasar los límites de sus capacidades. Asimismo, fantaseaban con la idea de jugar a ser Dios y crear seres a su imagen y semejanza. El enorme progreso en ingeniería, electrónica e informática lo está haciendo posible. Aquí, allá... en todas partes. Los robots están entre nosotros


Un robot es, por otra parte, una máquina que puede programarse para que interactúe con objetos y lograr que imite, en cierta forma, el comportamiento humano o animal.
La informática, la electrónica, la mecánica y la ingeniería son sólo algunas de las disciplinas que se combinan en la robótica. El objetivo principal de la robótica es la construcción de dispositivos que funcionen de manera automática y que realicen trabajos dificultosos o imposibles para los seres humanos.

la robótica ha conseguido también crear robots que sean útiles para asistir y ayudar a todas aquellas personas que se encuentran con algún tipo de discapacidad física. Y eso sin olvidar el conjunto de robots que se están diseñando en el ámbito militar para, por ejemplo, llevar a cabo operaciones de salvamento.
El escritor Isaac Asimov (1920–1992) suele ser considerado como el responsable del concepto de robótica. Este autor, especializado en obras de ciencia ficción y divulgación científica, propuso las Tres Leyes de la Robótica, una especie de normativa que regula el accionar de los robots de sus libros de ficción pero que, de alcanzarse un grado de desarrollo tecnológico semejante, podrían aplicarse en la realidad futura. Dichas reglas son impresas como fórmulas matemáticas en los “senderos positrónicos” de la memoria del robot.




  
TRES REGLAS FUNDAMENTAL DE LA ROBÓTICA y dicen así:
1.         Ningún robot puede hacer daño a un ser humano, o permitir que se le haga daño por no actuar.
2.         Un robot debe obedecer las órdenes dadas por un ser humano, excepto si éstas órdenes entran en conflicto con la primera ley.
3.         Un robot debe proteger su propia existencia en la medida en que está protección no sea incompatible con las leyes anteriores.
En definitiva, las famosas leyes de Asimos son aplicables a un universo donde los robots son seres inteligentes, pero quedan relegadas a una cartilla de parvulario al enfrentarse con la dura realidad. Pero esto son sólo anécdotas.

PRINCIPALES USOS; MÉDICO, MILITAR, INDUSTRIAL, COMERCIAL

Estas máquinas son hoy muy utilizadas a instancias de los ámbitos comerciales e industriales para efectuar tareas exactas y por supuesto porque implican una mano de obra más barata que el ser humano.

Incluso se los usa para realizar aquellos trabajos más desagradables que los seres humanos rehúsan hacer porque son pesados, peligrosos o insoportables. En las plantas industriales es común ver desplazarse a un robot y realizando tareas como las de montaje, embalaje y traslados, entre otras.

Y aunque todavía hay mucho por descubrir y definir se están empezando a utilizar algunos diseños de robots en el ámbito de la medicina, más específicamente en cirugías menores.
Siguiendo en el campo de la salud, también los laboratorios de análisis clínicos han comenzado a incorporar a estas máquinas con la misión que trasladen materiales especiales y muestras biológicas.

También hay un empleo del robot en el plano militar dedicado a las acciones de salvación humanitaria, siendo las máquinas de gran ayuda en este sentido.

Y los más optimistas al respecto de lo que un robot es capaz de llegar a hacer ya aventuran que podría crearse uno que se ocupe del cuidado y asistencia de personas mayores que lo demandan porque no pueden hacerlo per se, actualmente existen algunos que ayudan a personas con discapacidades en algunas acciones específicas que no son capaces de concretar solos.



ORIGEN DEL TÉRMINO

El término Robot alcanza su primera repercusión en la década del veinte del siglo pasado, a instancias de R.U.R (Robots Universal Rossum), una obra teatral de ciencia ficción escrita por el autor checo Karel Čapek, en la cual por primera vez se hace alusión al concepto de robot, extraído del término checo robota, que significaba trabajos forzados.

ANTECEDENTES DE LA ROBÓTICA

Desde sus comienzos como disciplina y como parte fundamental de la Ingeniería, la Robótica ha estado incansablemente buscando construir artefactos que materialicen el deseo humano de crear seres a su semejanza a quienes poder delegarles tareas, trabajos o actividades por demás pesadas y desagradables de llevar a cabo. Pero y aunque muchos ni se lo esperen, desde tiempos inmemoriales, muy, muy lejos de las computadoras, hubieron unas cuantas expresiones de la robótica. Porque por ejemplo, los antiguos egipcios unieron brazos mecánicos a las estatuas de sus dioses y esgrimían que el movimiento de los miembros se llevaba a cabo por obra y gracias de estos, inclusive los griegos construyeron estatuas que operaban con sistemas hidráulicos, los cuales eran utilizados para fascinar a los adoradores de los templos.

Y también, aproximadamente entre los siglos XVII y XVIII, en Europa, se construyeron muñecos mecánicos muy ingeniosos que ostentaban algunas características como las que presentan los robots de la actualidad. En un constante e incansable ensayo a través de los siglos y cuando ya era un hecho la entrada en el nuevo milenio (2000), la empresa Honda Motor Co. Ltda. Concretó a Asimo, el primer robot humanoide capaz de desplazarse de forma bípeda e interactuar con las personas.